2.
Ha venido un joven que asegura ser encargado del butano, pero tienes gas natural. ¿O el jardinero pasa demasiado tiempo en casa? Solo hay que recordar la emblemática aventura de Gabriel, el personaje de Eva Longoria, en «Mujeres desesperadas» con su atractivo y jovencísimo jardinero.
3. No hay que engañar a nadie: las mujeres usan fajas. Y ahora más que nunca pues han conseguido unos diseños espectaculares y mejores resultados. Una de ellas es la firma Spanx, famosas como Beyoncé y Jennifer López no ocultan que las utilizan. Pero lo que una mujer enamorada y entusiasmada con la relación jamás dejará que su novio/marido la vea solo con la faja.
4. Las reuniones de «tuppersex» con las amigas o durante una despedida de soltera son el momento perfecto para reavivar el fuego. Pero… si nunca ves lo que tu chica ha comprado, comienza a preocuparte.
5. Zapatos. Sí, las mujeres utilizan los tacones como arma de seducción y la que diga lo contrario, miente. Por eso, si tu pareja ya no se pone esos que le provocaban vértigo y prefiere ir con sus botas planas o sus sandalias todo el tiempo sin excepción (obviamente hay momentos para todo): algo ha cambiado. Y si se los pone cuando sale sola con sus amigas, comienza a preocuparte.
6. Ya no hace apenas planes contigo… Hay menos detalles… Se acabaron las notas en la nevera por la mañana y las cenas sorpresa.
7. Nunca había tenido contraseña en el móvil. Ahora la tiene. Vale, puede que esté preocupada por si le roban el móvil, pero también puede que prefiera más intimidad que antes…
8. Antes se reía de cualquier chiste malo que contaras y ahora parece que solo Dani Martínez consigue sacarle las carcajadas.
9. El móvil es un chivato de lujo. Antes contestaba llamadas y «whatsapps» a la velocidad del viento. Ahora puede pasarse la tarde entera sin dar señales de vida… Recordemos el corto del «Doble check» y la historia de (des)amor que cuenta.
10. ¿Pasa demasiado tiempo en la oficina y nunca ha sido una adicta al trabajo? ¿Habla más de la cuenta del nuevo jefe? No hay que olvidar que a veces puede ocurrir… Que se lo digan a Robert Pattinson que tuvo que ver (junto al resto del planeta) cómo su novia se besaba con el director de su última película… También puede ocurrir con algún compañero de trabajo… Pobre Jennifer Aniston cuando se enteró de que Brad Pitt y Angelina Jolie (en «Mr y Mrs Smith») se habían enamorado…
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